Hay que distinguir la formación de grado o de postgrado, pues los requisitos son distintos.
Para la formación de grado, el título ha de ser reconocido. El reconocimiento varía según países. Por ejemplo, en España existe un reconocimiento oficial, mientras en otros países, como los Estados Unidos, los títulos son reconocidos por instituciones; esto último no implica, ni mucho menos, que carezcan de reconocimiento (no se puede comparar la Universidad de Harvard con otras universidades norteamericanas, aunque legales, de nulo reconocimiento).
Además, en la formación de grado, hay que tener en cuenta otra cuestión: la calidad de la institución que otorga el título. Es países como España, con un reconocimiento oficial, una tutela y directrices del Estado, esta cuestión, es más relativa, que en los países anglosajones, en los que se deja más libertad a las universidades. En estos últimos casos, conviene acudir a la información que dan ciertas instituciones sobre la calidad de los centros, que aparece frecuentemente en datos numéricos.
En el próximo post, trataremos la formación de postgrado, o sea, el master.
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